Corría
por el bosque, sentía como estaba atrás de mí, pisándome
los talones. Corría, corría, corría pero siempre
lo sentía su presencia en mi espalda; volteaba la cabeza hacia atrás pero no veía
nada, la obscuridad de la noche cubría mi vista, pero sabía que estaba ahí y
que era mucho más veloz que yo. Pero ¿Por
qué no me alcazaba? ¿Por qué solo me perseguía? ¿Por qué no acababa esto de una vez?
Seguí
corriendo y corriendo solo escuchaba el ruido de mis pisadas, que disminuían su paso cada vez más y más lento, sobre la hierba que crecía
en el bosque, el sonido de mi respiración
agitada por la carrera y el sonido de los animales nocturnos. No escuchaba que
me siguiera pero sabía que estaba ahí sentía su presencia, podría ser lo más sigiloso de todo el mundo pero podía sentir
su presencia de cazador sentía como
gozaba de este juego del gato y el ratón, y por su puesto él era el depredador y yo su víctima.
De
repente todo quedo en silencio ya no se escuchaban el sonido de los animales
solo mi respiración y mis pisabas y por su puesto su presencia. Ya estaba muy
cansada no podía correr más, enfrente de mi apareció un claro. Era muy hermoso
se veía como la luz de la luna reflejada en las hermosas flores blancas y lilas
que se esparcían por todo el claro y la luna se veía tan cerca que parecía que
la podías tocar. Sin duda era el paisaje más hermoso que hubiera visto en mi
vida.
No pude
evitar detenerme a contemplar en ese hermoso lugar, sabía que detenerme a contemplarlo podía causar mi muerte pero sincera mente en ese momento
no me importaba si vivía o moría, pero en
el caso de morir este lugar era hermoso para
hacerlo. Además no tenía a nadie por quien vivir mi familia avía muerto cuando yo era pequeña, no tenía ningún amigo y me
habían acabado de correr de mi empleo y
de mi hogar. Mejor terminar mi
existencia en este hermoso lugar. Me quede parada en medio del claro observando la enorme luna llena. Después de un tiempo
me di cuenta que no sentía la presencia
del depredador sobre mí, decidí despegar la vista de la enorme y hermosa luna que resplandecía en el cielo.
Mire el borde del bosque y no vi nada, di
vueltas para asegurarme de que no hubiera nada y no lo había. En ese momento llegue a pensar que no había ningún
peligro que todo fue creado por mi
imaginación, por mi tonto deseo de acabar con mi vida.
Después
de un tiempo me acosté encima de las flores que tenían un exquisito
aroma y seguí contemplando la luna que me
bañaba con sus intensos rayos de luz. Y me quede ahí por un buen tiempo no supe cuánto, hasta que escuche una voz.
-Nunca
había visto aun humano poder disfrutar de la maravilla de la naturaleza
como tú lo has hecho en este largo tiempo.- Instintivamente al escuchar
su voz me levante rápidamente.
-¿Quién
eres?- pregunte.
-Soy tu
cazador.- Estaba segura que alguien me seguía. No era parte de mi
imaginación, él me seguía.- Pero no debes alterarte ahorra me has
fascinado tanto que ya no voy a matarte.
- ¿Y por
qué ahorra no?
-Porque
me has fascinado completamente. Sabiendo que te perseguía y que estabas a punto de morir no dudaste en detenerte a contemplar este
hermoso paisaje que ha creado la madre
naturaleza y quedarte observando por tanto
tiempo y despreocupadamente, y ahorra que te digo que te iba a matar no has salido corriendo como la gente normal. Por esa
razón quiero que te unas a mí.
- ¿Qué me
una a ti?
-Sí,
quiero que seas mi compañera, mi pareja, por toda la eternidad que vivamos
en la noche y nos ocultemos del día y que disfrutemos
de las bellas noches, como esta, por los siglos
y los siglos hasta que sea el fin de los mundos ¿aceptas? hermosa dama.
Espero que les haya gustado :3
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