6 de agosto de 2012

hola!!

hola perdón eh estado ocupada con algunos asuntos y por eso no eh subido nada ademas q en la compu q escribía mis historias se descompuso así q tendré q escribir de nuevo pero tratare de hacerlo lo antes posible para q puedan seguir leyendo :D

28 de mayo de 2012

Hola

Que tal? Perdón pero no eh podido subir capítulos es que estoy muy ocupada con mis exámenes finales pero por lo mientras comenten como como va las historias me gustaría su opinión :)

Gracias por pasar por aquí

25 de mayo de 2012

The kill kiss: Capitulo 12



Capitulo 12: Disfraz

En el almuerzo nos dirigimos hacia donde estaba Edward, Lili Y Ned cuando vi que Marcela se dirigía a nosotros, más bien a Ángel. Hice una mueca de disgusto, Ángel la noto y me pregunto qué me pasaba.
-Me pasa ella.-dije señalando con la cabeza a Marcela que estaba más cerca de nosotros.
-¿Estas celosa?-dijo levantando una ceja y con una sonrisa divertida.
-Yo… no claro que no.-se rio de mi mentira. En ese momento Marcela llego a nosotros.
-Hola Ángel.-dijo con coquetería.
-Hola.-dijo y con la mano que no estaba agarrando mi charola de comida me agarro la mano y me jalo hacia la mesa donde estaban los demás.
-Hola.-dijeron todos juntos y Ned molesto.
-Hola, que les parece comer hoy afuera. Es que Arthur está ahí solo y quiero hacer le compañía.
-Claro.-dijeron y se levantaron de la mesa.
-Que bondadosa.-me susurro Ángel en la oreja. Le di un pequeño golpe en el hombro e iba a seguir los demás hacia afuera pero Ned me detuvo.
-¿No me vas a saludar?-
-Si claro- se acerco a mí y me dio un beso pero no como los de antes este era apasionado. Yo decidí corresponder le igual porque le dije que lo iba a intentar, aunque terminaría con él,  aunque sabía que no funcionaria no lo amo, sus besos no provocan nada en mí, no siento lo que me hace sentir Ángel. Nos despegamos del beso el me sonrió y me tomo de la mano y me jalo hacia afuera. Yo mire hacia donde estaba Ángel que se veía molesto, estaba celoso y eso me hizo una sonrisa. Por pensar que podía estar celoso, y le di una mirada de disculpa. El me miro y camino hacia nosotros. Cuando mire afuera Edward y Lili nos estaban esperando. Mire a Arthur estaba en la misma mesa mirando el cielo, solté la mano de Ned y me dirigió hacia él, me senté a su lado.
-Hola
-Hola Señorita.
-No me digas así, dime Ella así me llamo ¿no? Así como yo te llamo Arthur. Trátame de tu.
-Está bien.
-¿Quieres comer algo?
-Me gustaría.
-Vengan se van a quedar ahí parados.- ellos se quedaron con cara de que haces y el primero que vino fue Ángel me senté en el banco de la mesa y Ángel me paso la charola, le sonreí, y el se sentó junto a mí.
-¿Qué vas a querer?-le dije a Arthur para que escogiera algo de la charola. Escogió una manzana y yo un sándwich. Los demás se sentaron y empezamos a comer vi como Arthur se comía su manzana. La comía bien eso significaba que besaba muy bien, mire a Lili y me mando una mirada cómplice y nos empezamos a carcajear los demás nos miraban extrañados. Cuando nos calmamos dijimos al mismo tiempo:
-Es que son cosas de nosotras.-nos empezamos a reír. Así paso el descanso y luego otra vez las clases hasta que llego la salida y nos despedimos de Edward y Ned. Y subimos al auto de Ángel. Cuando arranco Lili dijo:
-Ahora si me van a decir que hay entre ustedes dos.-le mire como diciendo de que hablas.-A por favor no soy tan idiota como Ned…huy lo siento…para no darme cuenta que hay algo entre ustedes. Vi las miradas y las sonrisas que se daban y ahora que nadie nos escucha les puedo preguntar. -Ahora díganme.-mire a Ángel y suspire resignada.
- Realmente no sé que hay entre nosotros lo único que sé es que nos besamos.-Lili se tapo la boca para no gritar.
-¡¡Se besaron!! ¿En donde?, ¿Cómo fue?, ¿qué sentiste?, ¿besa bien?- Ángel carraspeo para dar a entender que él seguía ahí.-ups lo siento. Bueno luego me contaras y bueno que pasara con Ned.
-Le dije que lo nuestro no funcionaria y pues terminare con él en la fiesta.
-Que mal…bueno no importa.
-Ya llegamos.-dijo Ángel.
-Bien. Te prometo Ángel que Ella será la mujer más guapa de la fiesta y por supuesto después de ella, yo.
-Si, te creo.
-Bueno bajando todos.-dijo Lili cuando bajamos Arthur ya estaba alado de nosotros.-Bien chicos tendrán que comprar su disfraz así que para que no compren uno… malo estaré ahí para verlos. Mientras Ella espera afuera de la tienda, no quiero que los vea y ustedes no la verán.-Asentimos.-bien entonces entremos.-dijo y me agarro del brazo. Ángel y Arthur nos seguían por el centro comercial como dos verdaderos guarda espaldas. Nos detuvimos en una tienda donde Lili encontró su disfraz perfecto, solo lo tuvimos que ver y lo supimos. Era una bruja gótica, avían dicho en la tienda que se llamaba así, era como de un color como gris, muy bonito [1] (realmente no sé como describir el vestido soy muy mala para eso así que le podre más o menos como es)
Pero yo no encontraba mi vestido no encontraba el vestido que me gustara, bueno muchos me gustaba pero Lili decía que tenía que ser perfecto, pasamos un monto de tiendas y ya me estaba cansando cuando lo vi estaba en una tienda inmediatamente Lili lo vio y se le dibujo una son risa en su rostro era perfecto. Ángel y Arthur nos esperaron a fuera mientras lo comprábamos. Era perfecto era el que más me gustaba pero no me convencía como me quedaba, pero Lili decía que se me veía perfecto, bueno lo compre y salimos.
-¿Bueno entonces de que es el disfraz? Porque este recorrido por todo el centro comercial tiene que valer la pena.-dijo Ángel.
-Es de brujita pero….
-Shhh-me callo Lili-es una sorpresa.
-¿Te disfrazares de lo mismo que Lili?-Pregunto Arthur.
-Sí pero…
-Shhh va ser una sorpresa. Y si se disfrazara de lo mismo pero el suyo es mucho más bonito y le queda muy bien así que seremos las hermanas brujas.-luego me miro se miro-aunque seamos completamente diferentes.-ella tenía razón ella tenía el cabello rubio y yo negro, ella tenía ojos azules y yo violetas, ella estaba un poco bronceada y yo era tan blanca como la leche, éramos completamente diferentes pero las mejores amigas.
Después recorrimos el lugar hasta en contra los disfraces, “perfectos” decía Lili, para ellos. Después de un rato lo encontramos bueno Lili se metió con ellos a la tienda mientras yo esperaba sentada en la fuente. Después de un rato salió Ángel.
-¿Y los demás?-pregunte.
-Lili todavía está viendo el disfraz de Arthur. A mí me libero.-dijo acercándose a mi sentando se en la fuente.-realmente le tengo lastima estar en las manos de Lili, hubieras visto su cara.
-Me la imagino.
-¿Puedo ver tu disfraz?
-No
-Anda un vistazo. Uno pequeñito.
-No.
-Anda solo un vistazo-dijo y me di un pequeño beso- pequeñito vistazo-otro beso-uno chiquito-otro beso-chiquitísimo vistazo-otro beso.
-Me estas convenciendo tal vez si sigues a si te lo deje ver.-me sonrió y me dio otro beso pero este fue más largo que el otro y se fue asiendo más apasionado, me agarro de la cintura y me acerco mas a él. Yo solté las bolsas y lleve mis manos a su cabello, me encantaba tocar su cabello, me fue pegando más a él y yo acercaba más su rostro al mío. Me ti mi lengua entro en su boca lentamente disfrutando cada parte de su boca. De repente alguien se puso enfrente de nosotros y carraspeo. Ángel y yo nos separamos rápidamente.
-Como se atreven a besarse enfrente de la tienda imagínense que Arthur los haya visto o qué tal si Ned se aparece por aquí, que no lo dudo. Yo estoy de su parte y lo saben pero no lo hagan enfrente de todos. Si quieren pueden besuquearse en la parte de atrás mientras yo conduzco.-dijo Lili.
-No, gracias. Ya comprendí. Y tengo hambre ¿podemos ir a algún lado?
-Si, vamos al nuevo lugar que
abrieron.

-¿Ese no es un bar?
-Sí, pero de día sirven comida, además dicen que el que atiende la barra esta…
-Nunca cambiaras ¿verdad, Lili?
-No
Arthur salió de pagar su disfraz y fuimos hacia el bar. Entramos y nos sentamos en una mesa para cuatro a petición de Lili que quería ver al tipo de la barra. Entramos y ella se le quedo viendo y cuando él la vio ella le sonrió.
-No empieces a coquetear, Lili, tienes novio ¿lo recuerdas? Se llama Edward.
-Sí, sí, sí pero aunque tenga mi regalo eso no evita que vea los demás. Como al tuyo está bien bueno.
-¡Oye!
-No te molestes solo lo vi ni que te lo quite yo estoy bien con Edward.
-¿Entonces por qué lo vez?
-Por que el nos ve, o más bien te ve a ti.- Ángel y Arthur se voltearon asía él.
-Hola, Ángel.- dijo él.- ¿Cuánto tiempo sin verte? ¿17 años? Antes de que salieras a buscar a tu amigo y a su querida mujer. ¿Para que? Para traicionarnos.
-Yo no los traicione solo no estuve de acuerdo con lo que hacían. Además no evite nada lo lograron acabaron con ellos ¿no?
-Si bueno por lo menos con él y ella pues estaba gravemente herida, no sobreviviría. Pero tu sabias que tenían una hija, su pecado, y que hiciste la buscaste como loco ¿para que? solo es un hibrida. Una hibrida que nunca será aceptada por nosotros, y ellos lo sabían verdad, sabían que no sería aceptada solo la aceptaríamos con una condición, el sabia y de seguro ella acepto para protegerla pero ¿quien quisiera salvar a una hibrida? Claro tu, tu aceptaste solo por ellos. Para salvar a esa hibrida, tu único recuerdo de ellos esta marcado con sangre y no se puede romper, tu aceptas te a….
-¡Y cállate!
-Oh, entonces ella no está enterada ¿verdad?-dijo señalándome.-Ella así escrito lo anunciaron los ancianos después que Alexander les dijo que la encontraste ya se anuncio ante todos. Solo que ella no lo sabe ¿Cuándo se lo dirás? Saber que sus padres escogieron su destino, que mal. Ahora todos la buscan, tú lo sabes, no dejaran que suceda. Y tú la proteges junto a un asqueroso ángel. Ella ¿quieres saber la verdad?
-¡Ya cállate!
-Te lo diré si quieres pero luego ¡te matare!
-¡Ya cállate! Vámonos de aquí.- dijo y me agarro del brazo y me saco Arthur y Lili iban atrás de nosotros.
-¿Qué quiso decir con eso de escrito en sangre?
-Tus padres escribieron con sangre que sería tu protector, está escrito en el destino, y lo del anuncio después de que te encontré Alexander lo anuncio. Anuncio que sería tu protector, estaba escrito.
-¿El mato a mis padres?
-Sí, pero con otro grupo él es muy débil por eso no nos ataco ahora sabe que lo hubiera matado.
Después de eso decidimos comer en mi casa por suerte no estaba Laura. Toda la semana se paso rápido no hubo otro encuentro de vampiros y Ángel siempre iba de noche a mi habitación y se quedaba en el sillón blanco después de un beso de buenas noches. Con Ned todo iba “bien” puesto no avía mucha química entre nosotros éramos como amigos nada más que me besaba. Laura igual, Karla también seguía siendo mi madre ella me crio, Lili igual y con Arthur estábamos llevándonos mejor cada día. Y hoy me desperté como siempre y nos fuimos a escuela le había pedido permiso a mi mamá de quedarme en la casa de Ángel y ella dijo:
-Si.
Así nada mas como si no le importara después me dijo que confiaba en Ángel que era una buena persona 

y que sabía que me cuidaría. Llego el final de clases. Y no dirigimos a casa de Lili.


[1] El disfrz de bruja de Lili. No sabia como describir lo pero aui esta. 



17 de mayo de 2012

The kill kiss: Capitulo 11



Capitulo 11: Suspiros

Ángel…ya te puedes…salir-tartamudee un poco porque me ponía muy nerviosa cuando me miraba así. Solo asintió y salió. Yo termine de vestí me y salí. Salí del cuarto de baño y me dirigí al espejo agarre el cepillo y me cepille el cabello.
-Deja que yo lo haga.-mire a Ángel por el espejo.- por favor déjame hacerlo. Eso me hace recordar cuando peinaba a mi hermana pequeña cuando era humano.-dijo extendiendo la mano para que yo le entregara el cepillo y así lo hice, se lo entregue.- siéntate en la cama.-me senté y empezó a cepillarme. Me gusto que lo hiciera.
-Ya termine.
-Gracias.-dije tomando el cepillo de sus manos. Y yendo otra vez hacia el espejo para maquillarme. Me puse delineador negro, que con binaba con mi ropa de hoy convers negros, pantalón de mezclilla oscuro, una blusa blanca con el signo de amor y paz, un chaleco negro, y un poco de brillo labial. Mientras me ponía el brillo Ángel dijo:
-¿Por qué vez eso en mis ojos?- me sorprendió su pregunta y deje de ponerme brillo.- ¿Por qué me acariciabas la cara cuando lo decías? ¿Por qué lo hacías con esa voz tan dulce?-me quede estática mirándolo por el espejo mientras decía eso. Yo desvié la mirada y dije:
-No sé de que hablas.-cuando me di cuenta Ángel ya me estaba volteando hacia a él.
-No me mientas yo te vi.
-Estaba muy dormida.
-No, no me vengas con ese cuento yo te vi estabas despierta vi con la ternura que me mirabas. Me tienes lastima ¿verdad?
-No como crees. Yo no te tengo lastima, te…- no, no yo no puedo quererlo, no puedo enamorarme de él. Pero yo… no se estoy confundida ya no sé nada está muy cerca de mi ayer pude controlarme porque mi cuerpo estaba débil. Pero ahora estaba muy cerca de mí.
-¿Tú qué?
-Yo… te lo diré en tu casa sino nos vamos Karla me matara.- asintió y se alejo de mi. Salí rápidamente del cuarto cuando escucho que tocaban el timbre. Escuche como abrían la puerta supuse que Karla la había abierto. Cuando baje las escaleras vi que era Ángel quien había tocado el timbre.
-Hola.- salude como si no lo hubiera visto hace un segundo.
-Hola ya vámonos. Fue un placer verte de nuevo Karla. Anda vamos apúrate.-si que este hombre cambiaba de humor muy rápido. Dijo y camino hacia su auto. Yo me acerque a la puerta.
-Adiós.-me despedí de Karla.
-Sí que cambia muy rápido de humor ¿no?, hija. Debe de agradarte mucho yo lo sé lo conozco no mucho pero sí y sé que es de las personas que te agradan su forma de ser, no le importa nada.- mire a Ángel que seguía caminando y voltee hacia Karla y asentí.- Adiós, hija. Yo corrí hasta llegar a lado de Ángel. Nos metimos al auto y Ángel manejo hacia su casa. Vi por el retrovisor que Arthur nos seguía. Llegamos a su casa y salimos del coche. Arthur también se estaciono y salió del auto.
-Buenos días.-le salude.
-Buenos días.
Entramos a la casa y seguí a Ángel a su habitación. Me senté en la cama y observe que se metía al cuarto de baño. Después de unos minutos salió con una toalla en la cintura y el pelo mojado, se veía tan sexy, reprimí un suspiro. Sin su camisa se veía tan musculoso quise ver como se sentían mis manos en ese torso y brazos, reprimí otro suspiro, tenía que salir de ahí. Y así lo hice camine hasta llegar a la sala, no me senté me quede parada junto al sillón. Y espere ahí hasta que Ángel apareció por el pasillo tan sexy como siempre. Y se paro al inicio de la sala y se recargo en la pared.
-Ahora contestaras a mis preguntas.- yo asentí.- primero que todo ¿es cierto lo que dijo Karla? ¿Te agrado?
-Si, claro me gusta tu actitud y Karla lo sabe muy bien.
-¿entonces en verdad vez soledad en mis ojos? ¿Me tienes lastima? ¿Por qué me acariciabas la cara? ¿Por qué lo decías con voz dulce? ¿Por qué me mirabas con ternura?
-Si veo soledad en tus ojos, y no, claro que no te tengo lastima más bien…te respeto, y pues…seré sincera quería acariciar tu cara, ni siquiera me avía dado cuenta que lo decía con voz dulce y lo de lo que te miraba tampoco.
-Así que querías acariciar mi rostro y supongo que ¿también querías oler mi cabello?
-Si.
-¿Y por qué?- dijo acercándose a mi.- ¿por qué haces todo eso?-dijo acercándose mas a mi hasta estar a un paso de distancia.
-Por que yo...-no pude resistir mas y di ese paso que nos separaba quería besar lo yo, YO no mi instinto para matar, agarre su cara entre mis manos y lo bese moviendo mis labios encima de los suyos el estaba estático no se movía y yo seguía besándolo otra se hubiera separado cuando la rechazaran pero yo quería que me respondiera que moviera sus labios con los míos. Y así fue me agarro por la cintura y me acerco mas a él y movió sus labios junto a los míos fundiéndonos en ese beso tan apasionado, juntando nuestros cuerpos, juntando nuestras lenguas. Entregándonos por completo. Ángel hizo que camináramos hacia atrás hasta topar con el sillón y caímos en el. Seguíamos besando hasta que se escucho el timbre y tocaron la puerta, no le hicimos caso y nos seguimos besando hasta que Arthur grito:
-Ella ¿estás bien? Ya es tarde.-Me separe un poco de Ángel y le dijo:
-Sí, ya casi vamos.-y volví a besar a Ángel. El se separo de mí y eso ocasiono que hiciera un puchero. El me sonrió y me extendió su mano para que me parara, la tome me arregle un poco el cabello y la blusa, y fuimos hacia la puerta. Cuando abría la puerta Ángel la detuvo y me beso él seguía estando sonriente, yo le sonreí y salimos de la casa. Arthur estaba enfrente de la casa dando vueltas me reí y Ángel también. Arthur se detuvo y nos miro, más que a mi miro a Ángel.
-No te desesperes.-le dije-no me va pasar nada en la casa de Ángel y Ángel no me hará nada. En eso estoy completamente segura. Creo que tendré que mucho trabajo contigo.
-¿Trabajo?
-Sí, necesitas ser más relajado. Y empezamos así si no te relajas tendré que escaparme y me perderás de tu vista, y tú no quieres perderme de vista ¿verdad?
-Sí, sí está bien.
-Ya vámonos.-dijo Ángel- no podremos entrar a la segunda clase tampoco ya es muy tarde.
-Si.
Nos dirigimos al auto, Ángel se adelanto a mí para abrirme la puerta. Me subí y el también. Arranco el coche y pregunto:
-¿Por qué me besaste?
-¿Por qué correspondiste el beso?
-No cambies el tema.
-Te bese  por que quería hacerlo, y por lo visto mi poder no te afecta por que ya eres un vampiro. Bueno eso es una teoría mía.
-Te correspondí el beso porque quería. Ella sabes que tienes novio…
-Si, lo sé pero yo no quiero a Ned de esa forma y se lo diré en la fiesta de Lili por supuesto estas invitado y Alexander también, que se dé una escapada de esas oficinas.
-¿Sabes que trabaja en una oficina?
-Claro, quien no sabría quien es Alexander Von el gran empresario y millonario. La familia Von es famosa y deben ser vampiros ¿no?
-Si.
-Bueno que valla nadie lo reconocerá es una fiesta de disfraces. Pero tú puedes ir así. Solo saca tus colmillitos y ya.-se rio.
-Lo tomare en cuenta.-yo me reí también y llegamos a la escuela como había dicho Ángel las clases ya avían comenzado así que nos sentamos enfrente de un árbol a platicar. Me conto que era más viejo que Alexander y mi papá juntos, que su color favorito era el violeta y el negro. El negro no me había sorprendido pero el violeta…
-¿Por qué te gusta el violeta? – el volteo hacia Arthur que estaba en una banca mirándonos parresia sorprendido. Ángel se acerco a mi oreja y me susurro:
-Porque es el color de tus ojos.-su aliento en mi oreja ocasiono que me estremeciera y me pusiera roja. Nadie me avía dicho algo así tan lindo. Bueno yo soy exagerada siempre pienso eso cuando alguien me dice algo lindo. Le sonreí y el a mi escuchamos que tocaban el timbre y nos paramos.
-Nos vemos luego Arthur.-dije despidiéndome con la mano.
-Si estaré aquí.
Nos dirigimos hacia la escuela y nos metimos a la clase de español, que tenia con Ned. Y por supuesto me lo encontré, me dijo que por qué no dejo que la esperara y conteste que se me hizo tarde y que no podía esperarme porque íbamos a recoger tarde a Lili. Después llego el maestro yo me senté atrás con Ángel y eso pareció molestarle a Ned eso era lo malo de Ned era muy celoso y esta vez sí tenía razones para estarlo. Porque me encantaba Ángel me estaba enamorando de él y yo quería enamorarme de él seme hacia una persona con carácter pero también puede ser dulce, es misterioso pero divertido no me avía reído tanto con el que con cual quiera en años, también decía las cosas como son no le importaba tratarme mal en frente de quien me crio o tratarme bien enfrente de las personas. Y era guapo recordaba su torso desnudo y su cabello mojado se veía tan sexy. Suspire.
-¿Por qué suspiras?-pregunto Ángel con una sonrisa. Yo me sonroje. Y negué con la cabeza.-Esta bien lo único que sé es que debe ser algo bueno. Nadie suspira con esa sonrisa por algo malo.
-Sí, si es muy bueno.- volví a suspirar este hombre me robaba todos mis suspiros con solo recordar su cuerpos, sus manos en mi cintura, sus labios en los míos. Ese  beso fue el mejor de todos, nuestro primer beso. Suspire de nuevo.
-Señorita Ella. Podría  dejar de interrumpir la clase con sus suspiros o nos quiere contar que la trae así.- dijo la maestra Andrea. La maestra de español que a cada rato me molestaba.
-No, maestra por favor continúe con su clase.-dije
-Muy bien muchachos continuemos, les explicaba que…-y así pasaron las clases yo suspirando sin cesar y sentada en todas las clases junto a Ángel hasta que llego el almuerzo…

The kill kiss: Capitulo 10



Capitulo 10: Encuentro.

-Hueles muy bien-dijo y luego poso las manos en mi cintura y me acerco a él. Después me abrazo fuerte mente-te eh buscado por mucho tiempo y ahora te tengo.-yo no sabía qué hacer. Ya sabía que me estaba buscando y desde mi nacimiento donde mis padres murieron creo que el comprendía ese sentimiento ellos eran sus amigos y nadie lo ayudo cuando murieron solo él estuvo ahí no les delato su amor. Tal vez el en ese momento necesitaba a alguien, a alguien a quien abrazar como lo está asiendo ahora conmigo, como yo necesito un abrazo en estos momentos en los que eh descubierto la verdad, en que mis madres murieron en lo que soy, en mi origen y nadie me ha preguntado como estoy, como me siento; un consuelo, una palabra de que todo va a estar  y este abrazo es como que me dieran todo eso y más porque lo necesitaba, lo necesitaba mucho demasiado. Lo abrase muy fuerte y empecé a llorar ya no lo resistía eran demasiadas cosas para mí.
-No llores.-me dijo.- ve a cambiarte.-hice lo que me dijo agarre mi pijama y fui al baño para ponérmela. Mi piyama era un pequeño short y una blusa de tirante morada. Me vi en el espejo tenía los ojos rojos por llorar me limpie las lagrimas y salí. Ángel seguía parado en el mismo lugar. Se volteo a verme. Me miraba de arriba hacia abajo y de abajo hacia arriba. Me sonroje mucho y él lo noto así que volteo hacia otro lado. Yo no pude aguantar las ganas y otra vez empecé a llorar. Ángel volteo a verme de nuevo y dijo:
.-No, no llores.-dijo como queriéndose acercar a mí y como que no. Decidió acercarse y abrazarme yo también lo abrace. No sé cuánto tiempo pasamos así, yo ya avía dejado de llorar pero nos seguíamos abrazando. Ángel en un momento me cargo se sentó en la cama y con una mano la distendió luego me puso en la cama y me arropo.
-Ya estás bien ¿te sientes bien? ¿Quieres algo?-me pregunto con la voz más dulce que avía escuchado en mi vida.
-Si ya estoy bien, me siento bien solo que es muy no sé cómo decirlo pero es muy complicado para mí todo esto saberlo de la noche a la mañana.
-Si lo comprendo.
-Y no gracias no necesito nada creo que debo descansar.
-Si.
-¿Ángel?
-Mmm
-Ciento a verme comportado así en el auto no era mi intención.
-No, tú no tienes la culpa yo me desespere muy rápido. Debí esperar que lo dijeras que dijeras que veías en mí.
-Aja.-dije bostezando.
-Mejor duerme. Buenas noches.-dijo besando mi frente como lo asían los padres cuando querían que sus hijos ya se durmieran.
-Buenas noches.-dije y cerré los ojos.-Ángel-dije.
-SI-Dijo y yo abrí los ojos. El estaba al frente de mi cama.
-Acércate.-dije y el se movió a lado de mis pies-acércate mas-se movió hasta mi lado pero aun seguía parado y con cara de confusión-arrodíllate-le dije. Por lo visto tenía que decirle paso por paso lo que tenía que hacer.- acércate mas- se acerco un poco. “así nunca acabaremos” pensé. Puse mi mano en su nuca y lo acerque a mí hasta que mis labios quedaron cerca de su oreja- lo que vi en tus ojos es-dije y después me aleje viendo eso ojos amarrillos tan hermosos y confundidos.-vi- dije y acaricie su rostro. Sé que estaba medio dormida pero ese no era el caso sabía perfectamente lo que asía. Pero mañana podía decir que estaba demasiado dormida. Acaricie toda su cara, su frente, sus orejas, pase mi dedo por sus ojos su nariz, su mentón, su cabello.- vi- volví a repetir. Y acaricie sus labios y viendo lo a los ojos dije:
-Vi o triste y solo que estas. Descubrí que tienes un secreto y que no me lo rebelaras.-dije- aun.- agregue. Y acaricie por última vez su mejilla y caí profundamente dormida.
Desperté a la mañana siguiente recordando cómo se sentía su piel. Sonreí. Me senté en la cama y pude ver que Ángel seguía en la habitación sentado en unos de los sillones blancos recargando la cabeza en el sillón con los ojos serrados. Sabía que no estaba dormido, el me había dicho que no podía dormir, entonces debe estar tan metido en su cabeza que no me avía sentido. Me levante cuidadosamente de la cama tratando de no hacer nada de ruido y me acerque hasta el recordé que el avía dicho que olía muy bien me pregunte como debo de oler y más me pregunte a que olía el me puse atrás de él y hacer que mi nariz a su cabello, olía a chocolate, menta y otro olor que no pude reconocer pero olía exquisito, el rápidamente se levanto del sillón y se voleo asía mi con cara de sorprendido.
-Ella no te sentí.
-No claro que no ya me di cuenta que hubiera pasado si envés de ser yo hubiera sido alguien más como Karla me hubiera matado por meter a un hombre a mi habitación. ¿Y en que pensabas?- dije todo esto con una sonrisa en la cara, no podía dejar de sonreír y no sabía por qué.
-Bueno tienes razón tengo que ponerme más atento y no pienso en nada importante.
-A bueno.
-¡Ella!-grito Karla detrás de la puerta tocándola. Yo mire sorprendida a Ángel.-puedo pasar.
-Espera, Karla.-dije. Me acerque a Ángel y le agarre de la mano. Y lo jale hasta el baño, su contacto se sentía tan bien.-metete aquí horita se va-le susurre a Ángel. Y cerré la puerta del baño. Y fui a abrirle a Karla.
-Hija todavía no estás lista se te va a hacer muy tarde, Ned ya está abajo esperándote.
-Tan tarde es. Dile a Ned que no se preocupe que vaya por Lili, Ángel me llevara.
-A pero que reguero tienes aquí. Anda ve a bañarte yo arreglo tu cuarto.
-No tienes que molestarte.
-No es ninguna molestia anda báñate estoy segura que de todas formas vas a llegar tarde pero no tanto apúrate.- sabía que no podía decir que no a Karla eso lo aprendí de ella. Así que agarre mi ropa y me metí al baño. Ángel estaba ahí. Mirándome.- Cuando ella dice algo es así.-conteste a su mirada. Suspire.
-No escucho la regadera, Ella.-grito Karla.
-Te tendrás que bañar.-dijo Ángel.-Se te va a hacer tarde además tenemos que pasar a que me cambie. Así que apúrate.
-No me desvestiré enfrente de ti.
-Pues mete te a la regadera.-hice una mueca de disgusto y él me sonrió. No podía competir con esa sonrisa. Di un suspiro de derrota y el sonrió mas. Me metí a la regadera y puse la cortina. Me empecé a desvestir cada ropa que me quitaba la aventaba hacia fuera cuando llego el momento de quitarme la ropa interior me sonroje, sabía que él estaba afuera y que Karla seguía ordenando mi habitación y que no podía sacar a Ángel del cuarto de baño, y avente mi ropa junto a la de los demás. Abrí el agua y sentí como me relajaba.
-¿No vas a cantar?- pregunto Ángel.
-No canto en el baño.-le respondí.
-¿Por qué no?
-No creo que cante muy bien.
-No, enserio haber canta algo.
-No.
-Por favor. –Suspire otra vez y empecé a cantar la de todo cambio de Camila mi entras me bañaba. Cuando termino la canción se escucharon aplausos, yo estaba roja como tomate estaba segura no me gustaba cantar enfrente de los demás.
-Cantas como los Ángeles-dijo Ángel.
-Creo que eso es un cumplido. ¿Viniendo de ti?
-Yo puedo dar cumplidos. Si se los merecen.-dijo cuando avía terminado de bañarme, cerré la regadera.
-Me puedes pasar una toalla, por favor-dije.
-Si-dijo y luego sentí la toalla. Me la puse. Y salí Ángel me miraba de arriba hacia abajo y de regreso “que nunca terminaría esto” pensé y me sonroje.
-Ella ya termine de arreglar la habitación apúrate.-dijo y se escucho como cerraba la puerta. Pero Ángel me seguía mirando.
-Ángel…ya te puedes…salir-tartamudee un poco porque me ponía muy nerviosa cuando me miraba así. Solo asintió y salió. Yo termine de vestí me y salí.

The kill kiss: Capitulo 4



Capitulo 4: Secreto

-Ella, ¿Qué paso?-ella no respondía-tranquilízate, Ella-ella no dejaba de llorar no sabia que hacer hace mucho que no estaba en una situación así ,ella empezó a llorar mas y yo no dude en abrazarla le decía que se tranquilizara. Se tranquilizo y le pregunte:
-Dime ¿Qué paso?
-Yo…bese…a….a….Ned..y….y….el-ella empezó-se mu…¡murió!-¿Cómo?  ¿Beso a Ned? No que eran solo amigos “Tranquilo, Ángel. Tienes que tener la cabeza fría no tener celos” ¿celos? ¿Tengo celos? “Tranquilo, Ángel, contrólate”  le pregunte si lo había besado y ella dijo que si. Lleve a Ned a mi auto y luego la lleve a ella se quedo dormida en el camino hacia mi casa. Después de acostar la en una cama llame a la única persona que me podía ayudar.
-Alexander, tengo un problema…
Después de hablar con Alexander fui a ver a Ella a la habitación. Se veía ¿confundida? me acerque mas a ella hasta quedar alado de la cama, quería descubrir porque estaba confundida, no me había dado cuenta que estaba tan cerca asta que ella despertó de repente y nuestras caras quedaron tan cerca que podía sentir su respiración agitada contra mi rostro.

Ella (versión)

Se veía todo blanco, caminaba, caminaba y caminaba, y no se veía nada. Enfrente de mi apareció un hombre como de mi misma edad.
-¿Quién eres?-pregunte.
-Soy Arthur.
-¿Por qué estas aquí?
-Vine para ayudarte.
-¿Para ayudarme?
-Si.
-¿Cómo me ayudaras?
-Vengo a ayudarte para que sepas la verdad.
-¿Cuál verdad?-pregunte estaba muy confundida.
-Si, pronto lo sabrás. Pronto llegare…
Desperté tan deprisa que quede sentada en la cama. Enfrente de mi estaba el.
Vi su rostro, el rostro de Ángel, tan cerca de mí que sentía su respiración golpeándome la cara, estaba tan tranquila no como la mía que estaba aguatada. Pude ver sus ojos con tanta claridad ahora, sus ojos eran de un amarillo tan intenso como el sol.
Estaba tan cerca que solo con moverme un poco hacia el sus labios quedarían sobre los míos, pero no podía hacer eso o tal vez ¿si? No, no podía porque le podía pasar lo mismo que a Ned. Empecé a llorar y lo abrace.
De repente tocaron la puerta y nos separamos, rápidamente el fue hacia la puerta y la abrió. Apareció un hombre mayor que el.
-Ángel.-dijo y volteo a verme-¿es ella?-pregunto
-Si-contesto el. El hombre se acerco a la cama y se sentó junto a mí. Se acercaba mas y mas viéndome y yo tenia esa sensación de besarlo ¿porque sentía esto? no yo no podía. Salí rápidamente de la cama y fui hacia Ángel y lo abrace.
-La asustaste-dijo Ángel molesto.
-Lo siento no quería...creo que primero me debería de presentar. Soy Alexander.- yo no podía hablar por lo asustada que estaba así que abrace más a Ángel.
-Creo que no estas ayudando Alexander.
-Esta bien ya antedí voy a revisar al muchacho. Lo siento no quería asustarte.-dijo. Se levanto de la cama y se dirigió a nosotros para salir, cuando iba pasando dijo:
-Creo que estas asiendo un buen trabajo Ángel.-y salió.
-¿Estas mejor?-pregunto. Yo asentí con la cabeza y me sentó en la cama-¿Por qué te despertaste así?
-Tuve un sueño muy extraño.
-¿Un sueño? ¿Qué soñaste?
-Un hombre me decía que me diría la verdad y que iba a venir-empecé a llorar estaba muy confundida y asustada. No sabia que estaba pasando.
Ángel (versión)
Ella había dicho que le dirían la verdad pero ellos no pueden hacer eso, yo tenía que decírselo primero para ganarme su confianza como había dicho Alexander.
Ella (versión)
-Ella, yo te diré la verdad.-me dijo.
-¿Qué? ¿Cual verdad?-estaba muy confundida.
-Ella, tu no eres humana y yo tampoco lo soy.-dijo.
-¿Qué? ¿Cómo? ¿No soy humana? pero...-me interrumpió poniéndome un dedo en los labios
-Déjame explicarte primero antes de que digas algo ¿si?-yo asentí con la cabeza-No soy humano.  Yo soy una clase de mmm...lo llamarías vampiro. Si eso. Bueno Alexander también lo es.
-¿Yo soy un vampiro?
-No, si, no bono mas o menos te explicare tu eres....-lo interrumpió el timbre de la puerta-¿Por qué siempre pasa esto cuando alguien tiene que decir algo importante? siempre lo tienen que interrumpir.-dijo en verdad se veía molesto-Voy a abrir la puerta.
-No te vayas.
-Te acabo de decir que soy un vampiro y ¿quieres estar conmigo?-pregunto con una sonrisa, la mas hermosa sonrisa que haya visto.
-No quiero estar sola.
-Bien, vamos.-dijo y yo lo seguí cuando íbamos caminando pregunte:
-¿En donde estamos?-apenas me daba cuenta que no sabía en donde me encontraba
-En mi casa. -dijo abriendo la puerta. En la puerta estaba el muchacho de mis sueños, inmediatamente abrace a Ángel, que raro era un vampiro y se llama Ángel "Ella no es tiempo para pensar en eso hay un hombre enfrente de ti, que viste en un sueño, afuera de la casa de un vampiro"
-Arthur- dijo Ángel.

Destino en sueños: Capitulo 3



Capitulo 3: Encuentro

Todo el día estuve pensando en Grisel, en sus ojos sus lindos ojos, y suspiraba. Suspire otra vez ¿Por qué suspire? No, no me puedo estarme enamorando, solo lo eh visto una vez  y es un vampiro. Enamorada de un vampiro ¿por qué no? ¿Qué estoy pensando? No, claro que no. Rechazo esa posibilidad y además solo dijo: “lo siento” “hasta mañana”. Me estoy volviendo loca como puedo...
Alguien llamo a la puerta ocasionando sacarme de mis pensamientos.
-Pase-dije y entro Chase a mi habitación.
-Ya nos vamos, Tess. Oye te quiero preguntar algo ¿Por qué quisieron que el entierro fuera en la noche? No entiendo.- “porque ellos son vampiros y no pueden ir a un entierro de día” pero no podía decir eso.
-El doctor tiene cosas que hacer en el día y por eso es en la noche para que pueda asistir al funeral.- mentí –ya vámonos dije saliendo de la habitación.
Todo el camino estuvimos en silencio, yo miraba por la ventana como comenzaba el atardecer. Cuando llegamos todo el mundo me daba el pésame, paso un rato así hasta que llegaron los Gallairdi supuse que ya era de noche paso un tiempo más con los pésames y fui afuera para tomar aire. Pero cuando estaba fuera me ganaron las ganas de llorar y me arrodille pero sentí unas manos que me levantaban. Cuando estaba parada vi que quien me había levantado era Grisel, sus manos eran frías pero me gustaba, no pude aguantar más lo abrase y empecé a llorar. El se sorprendió al principio debe ser como lo trate y no sé porque los trate así, si mis padres los trataron bien y creo que sabían que eran vampiro, y además no me molesta que sean siempre eh sabido que existían. Cuando se le quito la sorpresa el también me abrazo pasamos un buen tiempo así que ya no estaba llorando. Alguien tocio atrás de nosotros, cuando voltee vi que era Chase.
-Lo siento, no quería interrumpir solo estaba preocupado por ti. No te encontraba en ninguna parte, lo siento.-se volteo y se fue, yo quería ir atrás de el pero Grisel no me soltaba.
-Grisel ya me puedes soltar estoy mejor.-me soltó.
-Lo siento.-dijo.
-Creo que debo entrar.-dije insegura.
-Sí, ve.-fui caminando hacia la entrada. De reojo vi que él se quedaba. Pensaba en lo que había pasado. Abrase a Grisel, a un vampiro y me sentí tan bien… no, no, no, no, no, no, no puedo enamorarme de él quien sabe tal vez beba mi sangre pero por qué no lo hizo ya, estábamos completamente solos. ¿Qué pasaría si supiera que yo sé que es? Como puede ser un vampiro alguien que se parece tanto a un ángel. Me acuerdo que de niña así lo llamaba “El ángel Grisel” pero después cuando crecí y investigue supe que era un vampiro “El vampiro Grisel” y ahora me pregunto ¿por qué me intereso más Grisel que Héctor? Sé que no fue por sus ojos oscuros, ni sus colmillos, ni su postura de caza ¿pero entonces que fue? Será que siempre estuve enamorada de él aunque lo vi solo una vez, que una sola vez vi esos ojos que me hipnotizaron, tan profundos y llenos de soledad. Un vampiro solo. Me pregunto si tendrá esa misma mirada que hace once años, claro que lo eh visto y su color de ojos, pero no directamente estudiándolos. La próxima vez me fijare…
-¿Tess dónde estabas? Te eh estado buscando.-dijo Kreilan.
-Estaba tomando un poco de aire en el jardín.- le dije la verdad fui a tomar aire… y me encontré con Grisel ¿suspire otra vez? ¿Qué me pasa?
-Sí, debes estar cansada vamos. Mañana tienes que levantarte temprano, no podrás dormir nada.-dijo Kreilan preocupada y un poco molesta.
-Kreilan debo decirte algo, yo escogí el horario y no creo que pueda dormir en tu casa así que dormiré en el avión.-le dije y yo avía escogido el vuelo que salía a las 4 de la mañana por distintas razones:
1. No creía que descansaría bien hasta llagar con Jassiel.
2. No quería darles más molestias a Kreilan y su familia.
3. A esa hora no hay sol así que podrán salir bien y cuando lleguemos ahí será la 1 de la tarde pero como no hay sol ahí no será problema para los vampiros.
-Vámonos-dijo Kreilan.
-Si.-dije.
Nos fuimos a la casa y Chase no dijo una sola palabra en todo el camino cuando llegamos se fue a su cuarto y decidí hablar con el porque  no era nada malo lo que había hecho. Subí me quede parada enfrente de su puerta debatiéndome en tocar o no tocar cuando el abrió la puerta.
-Chase necesito hablar contigo.
-No tenemos nada de qué hablar-dijo enojado. Yo me enoje nunca me había hablado así y por qué se enojaba si no había hecho nada malo.
-No sé por qué me tratas así que te eh hecho y no me digas que fue lo que viste con Grisel por que no estaba asiendo nada.-le grite y pareció que se calmo un poco pero no dijo nada.
-Y bien.
-Tess lo siento sé que no me debería ponerme así contigo pero me dio tanta rabia verte con él, que te tocara…
-Haber, haber ¿de que hablas? No entiendo.-le dije pero claro que entendía, yo le gustaba pero no quería entenderle ¿Por qué no? Si ayer tenía la posibilidad de que fuera mi novio ¿Por qué hoy no? Será ¿Por qué ayer no conocía a Grisel?
-Tess…-dijo el agarrándome de la cintura y acercándome a él- tu me gustas y mucho-dijo y después estaba acercando su cara a la mía pero lo avente antes de que me besara.
-Chase tu eres muy lindo pero no quiero comenzar algo que terminara mal.
-Es por el ¿verdad?
-No es por él. Yo me voy y no regresare y tú te quedaras aquí por eso no funcionara.-le mentí bueno solo en lo que no era por Grisel pero de todos modos yo me iba.-Nos vemos luego.
Y me fui a mi habitación estaba muy confundida ahora sabia que le gustaba a Chase pero no le correspondía. Tal vez si me hubiera preguntado ayer cuando mi tía seguía vivía y todavía no conocía a Grisel Gallairdi seria la novia de Chase en este momento. Me metí a bañar para relajarme de todo esto después guarde en mi maleta algunas cosas. Baje porque ya nos íbamos Chase y Kreilan ya estaban ahí. Me despedí de su papá y de Gregory. El viaje estuvo en silencio cuando llegamos vi a Grisel y a Héctor a unos metros de distancia eso significaba que era hora de las despedidas.
-Bueno Kreilan muchas gracias por todo.
-No te preocupes fue un honor en tener te en nuestra casa, cuídate Tess.-dijo tristemente y la abrase luego mire a Chase.
-Bueno adiós Chase y lo siento.-vi a su mamá que estaba sorprendida por disculparme- Tu sabes a lo que me refiero ¿no?
-Sí, Tess creo que tienes razón no hay ningún problema, cuídate.-me dijo y lo abrase. Me fui hacia donde estaban los Gallairdi.
-Hola, Héctor y Grisel-les salude.
-Hola.-dijo Héctor.
-Hola, Tess.-Dijo Grisel. Me gustaba me gustaba que dijera mi nombre con eso labios tan ¿Qué? “Ya deja de pensar en eso” me regañe “pero es inevitable” replique. Era oficial, me estaba volviendo loca.
-Aquí está tu boleto, estas junto al de Grisel ¿si no te importa?-me dijo
-Claro que no, está bien.
Paso como una hora más para que pudiéramos subir al avión cuando ya estábamos en nuestro asientos me acorde de que dije que iba a mirar sus ojos entonces voltee y él me miraba ahora no estaban tan negros tenían un poco de gris y ya no había solamente  soledad en sus ojos si no un montón de sentimientos que no comprendí creo que vi miedo, amor, esperanza, deseo, vergüenza, confusión pero porque sentía eso.
-¿Tienes sueño? Te vez cansada.-dijo con voz dulce que ocasiono que me derritiera en mi asiento.
-Si voy a dormir un poco.-dije y me acomode para dormir era raro no tenía miedo de dormir junto a un vampiro con ese pensamiento me quede dormida.

16 de mayo de 2012

The kill kiss: Capitulo 9



Capitulo 9: Cuidando o espiando

Nos subimos al auto y mientras esperábamos a los demás dije:
-Gracias.
-¿Por qué?
-Por impedir… ya sabes.
-Es mi trabajo.-dijo agarrando fuertemente el volante y mirando hacia el frente. Yo me quede mirándolo, mirando esa cara que me cautivo desde que la vi por primera vez ese rostro que escondía tantos secretos, sentimientos que no rebelaban, que se los guardaba, ese rostro que se veía tan triste tan solo, quería descubrir que era lo que le perturbaba tanto.
-¿Qué miras?- pregunto.
-A ti.
-Si ya sé que me miras a mí, Ella, pero ¿Qué me miras?
-Miro tu cara.
-A ver me vas a decir que vez en mi cara o te callas.-dijo muy groseramente.
-Bueno si quieres que me calle, me callo.-le dije molesta. No le iba hablar por nada del mundo, bueno conociendo me hasta que llegáramos a casa. Entraron Lili y Ned al auto y nos dirigimos a mi casa. Todo el camino el habiente estuvo tenso primero porque estaba muy pero muy molesta con Ángel y segundo Lili y Ned no sabían que pasaba. Llegamos a casa y salimos del auto.
-Ella, voy a hablar con mi mama nos vemos… mmm… creo que mañana.
-Sí, ¿qué le dirás?
-mmm…que nos quedamos a dormir en casa de Lili porque fuimos al antro y se nos hizo tarde, siempre funciona.
-¿Siempre?-dije levantando una ceja.
-Ella, no es la primera vez que no llego a dormir a casa. Luego te cuento, hasta mañana.-dijo y me dio un pequeño beso y se fue.
-Yo te espero en tu cuarto.- dijo Lili.
-Sí.-dije y se metió a la casa
-Luego nos vemos, Arthur.- me despedí y fui caminando hacia la casa, sentí que alguien me miraba y voltee. Ángel me seguía, no le hice caso y me metí en la casa. Prácticamente le seré la puerta en la cara.
Cuando subía las escaleras me encontré a…
-¿En dónde estabas?-pregunto Laura.
-No te interesa.
-Estabas con Ned ¿verdad?
-Y si es así ¿tú qué?
-Le diré a mamá.
-No me importa lo que hagas.-dije y subí lo que me quedaba de las escaleras rápida mente y entre a mi habitación. Lili se encontraba sentada en mi cama. Mi cuarto no era muy grande estaba mi cama con sabanas grises con adornos de moños negros. Tenía mi tocador de madera, tenía dos sillones blancos, un armario de madera y una mesita de noche. El cuarto estaba pintado de morado claro. Y había una ventana que daba al patio trasero donde había un árbol. Me senté junto a Lili.
-Bueno, te contare todo.
-Si, dime ¿Por qué tanto misterio?
-Te lo diré tranquila mente.-ella asintió.-todo empezó cuando.-y ya no pude decir más tranquilamente, explote, no pude resistir mas fueron los dos días más locos, extraños y sorprendentes de toda mi vida, hasta ahora, y no pude mas se lo dije Lili de un jalón. Sabía que tenía que tratarlo con delicadeza era un asunto muy importante pero no pude aguantar más.
-Lo siento, no quería decir lo tan rápido pero esto me tenia harta, explote.
-No hay problema solo necesito un segundo para procesar todo lo que acabas de decir.-paso como cinco minutos, o por lo menos eso me parecieron, por fin hablo.
-Bueno, ya. Lo que entendí fue que tu mamá era un ángel y tenía el poder de algo con un beso, se llamaba Adina y tu papá que era un vampiro y se llamaba Dimitri, tenía el poder de matar con una mirada. Y tú tienes el poder del beso de la muerte, besaste a Ned y casi se muere pero Ángel te ayudo porque es tu protector y Arthur también lo es. Además conociste otro vampiro llamado Alexander que te ayudo a que no muriera Ned y después te hiciste novia de Ned cuando sabias que lo suyo no funcionara. Eso fue lo que dijiste ¿no?
-Si.
-Bueno entonces ¿con cual me puedo quedar? ¿Con Ángel o Arthur?
-No se, pregúntale a ellos-dije negando con la cabeza.
-Oh my good no puedo creerlo ¿Quién es? ¿Quién te gusta? ¿Quién de ellos es? Dime, dime. ¡Oh!-dijo tapando se la boca con las manos y si ¡Oh! ¡Oh! Me las iba a pagar- lo siento, no quería decir lo en voz alta, aunque eso no ayuda mucho de todos modos nos escuchan, lo siento.
-No hay problema, solo te colgare, acuchillare y te destrozare en pedacitos pequeños.-dije sonriendo diabólicamente.
-Lo siento, no era mi intención te juro que te lo recompensare. Oye también te quería avisar que mi fiesta es el viernes y la voy a hacer de disfraces. Así que tenemos que ir de compras ¿vamos mañana?
-Si está bien. Si no te importa tener guarda espaldas.
-No hay problema. Si son ellos los guardas espaldas.
-¡Lili!
-¿Qué? Solo digo la verdad. Ya te lo había dicho Ángel es un bombón y Arthur no se queda nada atrás.
-¡Lili!
-Hay Ella no seas histérica además sabes que digo la verdad. O me vas a decir que no están bien monos.
-Bueno, no puedo negarlo.-dije sonrojándome.
-Bueno ahora me tengo que ir a casa, te veo mañana. Oye ¿y cómo me voy a ir?
-Pues que te lleve Ángel. No, no va a querer. Así que hay que pedirle el favor a Arthur.
Bajamos y le pedí Arthur si la podía llevar, el acepto encantado. Me despedí de ella. Cuando iba a entrar a la casa Ángel dijo:
-Supongo que no me vas a dejar pasar ¿verdad?
-No.
Entre a la casa y fui a la cocina donde se encontraba Karla. Para mi mala suerte Laura estaba con ella.
-¿Dónde estabas?-Dijo Karla enojada.
-Estaba con Ángel.
-¿Ángel?
-Si, Ángel ya sabes quién ¿no? El me conto todo

-¿Todo?
-Si todo. Menos como la conociste quiero saber sobre eso ¿Cómo la conociste?
-Si está bien, Laura vete.
-Pero…
-Tengo que hablar con Ella, luego hablamos.-se fue molesta se escucho como azotaba la puerta, si cada vez que se enojaba asía eso nos íbamos a quedar sin puertas.
-Bueno por lo visto conociste a Ángel.
-Por lo visto tú lo conoces.
-Si, es un vampiro, era el mejor amigo de tus padres. Tu madre me lo presento.
-¿Pues cuántos años tiene?
-No se eso. Siempre me lo eh preguntado pero lo único que sé es que era mayor que tu padre.-me quede sorprendida más viejo que mi padre pero si se veía jovencísimo.
-Bueno yo conocí a tu madre afuera de mi trabajo, en ese entonces era muy joven como de tu edad, yo trabajaba como mesera en un pequeño puesto. Ella iba caminando por las calles muy sonriente mirando todo con su vestido blanco, yo iba también muy distraída así que chocamos tu mamá se puso a pedirme perdón como mil veces y luego me siguió pidiendo perdón, yo por supuesto creí que estaba loca, después la invite a comer platicamos mucho y pues ya sabes se pueden hacer amigos en un segundo yo la quería acompañar a su casa pero ella dijo que no podía pero que ella me acompañaba. Por camino a mi casa avía un bosque, ella se lo quedo mirando y yo a ella, tu madre quería entrar pero yo la detuve diciéndole que se podía perder. Ella acepto y me acompaño a casa. Al día siguiente también la vi afuera del trabajo y parecía más feliz que el día anterior platicamos y me conto que conoció a un hombre en el bosque dijo que sentía no haberme hecho caso pero que no se arrepentía por que había conocido al mejor hombre de la vida. Luego me dijo que me iba a decir un secrete que por favor no le dijera a nadie. Y accedí, me dijo que ella era un ángel y él un vampiro, que tenían que esconder su amor. Yo me sorprendí mucho pero le creí. Seis meses después me dijo que los avían descubierto pero lo bueno fue que era un amigo de Dimitri quien los avía cachado. Un mes después me dijo que Ángel era su mejor amigo. Tres meses más después me dijo que se casaría con Dimitri fui su madrina, también Ángel lo fue.- ¿Fue padrino de boda de mis padres?- ¿No lo sabías?
-No.
-Bueno después de un año ya no nos veíamos mucho pero me hablaba por teléfono y en una de esas llamadas me dijo que estaba embarazada, me llamaba siempre en los nueve meses para decir me cómo iba todo y me hablo el día que naciste. Un mes después Adina estaba en mi puerta sangrando me dijo que te cuidara que no te dijera quien eras en verdad que ella tal vez no regresaría pero que algún día Ángel podía venir por ti yo le ofrecí ayuda pero ella la rechazo y desapareció.
-Creo que hay muchas cosas que Ángel no me ha dicho ¿Verdad Ángel? Me tendrás que explicar todo.- dije sabiendo que Ángel nos escuchaba.
-¿El está aquí?
-Sí, pero no lo dejes entrar. Es un grosero.
-¿Te cae mal?- yo negué con la cabeza y le hice una señal para que no dijera nada. En realidad Ángel me caía muy bien era su forma de actuar podía ser grosero, desesperante y muchas cosas mas pero en serio me cuidaba y me ayudara aunque no le cayera tan bien y me encanta como hace que se moleste Alexander.
-Voy adormir este día ha sido muy pesado. Quiero descansar.
-Está bien. ¿No quieres cenar algo?
-No, gracias.-dije y fue a mi habitación, me metí al cuarto de baño y me duche. El agua me relajo. Salí de la ducha y me acorde que no había metido mi ropa, me puse una bata y salí. Iba hacia la cama cuando sentí ese sentimiento de que alguien me espiaba y mire hacia la ventana y vi una sombra enfoque más mis ojos y vi a…
-¡Ángel ¿Qué haces ahí?!-dije yendo hacia la ventana y abriéndola. El entro.
-Cuidándote.- respondió.
-Espiándome.-corregí- ¿Qué hubiera pasado si en vez de salir con una bata salía desnuda?
-Nada.-dijo acercándose a mí. Agarro un mechón de mi cabello y lo olio mientras que con la mano que tenia libre acaricio mi majilla que creo que estaba roja como tomate. Se acerco más a mí hasta poner su nariz arriba de mi cabeza.
-Hueles muy bien…